Aclaro primero que no soy la persona más imparcial del mundo cuando mi equipo se mide con otro dentro del terreno de juego, pero sí que como aficionado y amante de este deporte trato de ser razonable y me gusta que la justicia se imponga en el campo (aunque si mi equipo se impone con una jugada puntual, después de un horrible partido, tampoco es que lo lamente demasiado, mal de muchos de nosotros, los aficionados).
Yo soy un profano en cuanto a cómo la Federación selecciona y qué exige para ser árbitro de categorías base de fútbol,...