A lo largo del día corrió como la pólvora el rumor de la destitución de Rafa Benítez como entrenador del Real Madrid. Lo que empezó siendo un rumor acabó convirtiéndose en un secreto a voces al que ya solo le falta la confirmación oficial. Además, según apuntan diferentes medio, el técnico ya tiene sustituto: Zinedine Zidane.
Hacía semanas que Benítez parecía pendular en una cuerda floja y acabó por romperse al no ser capaz de ganar en Mestalla y aprovechar así la oportunidad de engancharse de nuevo a la lucha por la liga. Esa fue la gota que colmó el vaso, que ya hizo amago de precipitar en varias ocasiones esta campaña.
La poca sintonía con Cristiano Ronaldo, la nula confianza en Isco o James, o el hecho de tener a la grada del Santiago Bernabéu en contra dejaban al técnico blanco a merced de los resultados. En cuanto fallasen, se tendría que marchar. Y en eso el Real Madrid también ha fallado, porque en ninguno de los partidos ante rivales potentes han sabido dar la cara.
Parece que es cuestión de horas que Benítez se vea obligado a dejar su cargo y la papeleta será para Zidane. Tendrá que amansar a las fieras y volver a reconducir el rumbo de un Real Madrid plagado de estrellas a las que debe ser capaz de conjugar. Tendrá, al menos de entrada, el beneplácito del vestuario, de la grada y, por supuesto, del presidente.



